Espejos con recuerdos

Después del éxito de la Revolución en 1979 y la transformación de Irán en una democracia teocrática en la década de 1980, las imágenes del siglo XIX comenzaron a aparecer en la cultura visual iraní, desde el teatro y el cine hasta la pintura y la fotografía. Estas apropiaciones incluyen fotografías del siglo XIX tomadas por iraníes, modas y símbolos del Imperio iraní, como el León y el Sol. En "Espejos con recuerdos", Scheiwiller investiga el uso de tales imágenes por los fotógrafos iraníes contemporáneos. Sostiene que las reconstrucciones del pasado en las fotografías de estos artistas son espacios que cuestionan la memoria y la historia "oficiales". El acto de recordar se convierte en un acto de protesta y ayuda a reintegrar las perspectivas de segmentos de la sociedad previamente excluidos. Los escenarios que figuran predominantemente en estas fotografías son el harén y el estudio de fotografía. Existe una relación analógica fascinante y profundamente significativa entre estos dos espacios como sitios para la deconstrucción de las narrativas de la nacionalidad, la modernización y el género.